Con la llegada del buen tiempo, aumenta el número de comidas que se hacen al aire libre como barbacoas, picnics, parrilladas. Nos permiten disfrutar del día en un entorno muy agradable.

Este año más que nunca, parece que esta costumbre va a prolongarse también en otoño, ya que es un buena manera de sentirnos más seguros.

Nos encanta la idea de disfrutar de una comida con amigos, o con compañeros de trabajo pero en un espacio abierto, con luz natural y aire fresco.

No hace falta estar en un entorno idílico alejado de las grandes ciudades para poder disfrutar de un picnic. Seguro que cerca de tu casa, o de tu trabajo puedes encontrar espacios al aire libre o parques en los que poder disfrutar de un mediodía diferente.

Solo necesitarás preparar una ensalada o un delicioso sandwich y ganas de relajarte para disfrutar de un día cualquiera. Si no quieres molestarte también puedes comprar algo de camino, para llevar, en cualquiera de los restaurantes o cafeterías cercanas.

Ahora son muchas las opciones take away de las que podemos disfrutar, así que solo tendrás que elegir lo que te apetece comer.

Ventajas de comer al aire libre

Reducimos los niveles de estrés, desconectamos más del trabajo y nos desinhibimos.
Respirar aire puro contribuye a la relajación y desintoxicación de los nervios de nuestro cuerpo.
Está demostrado que comer al aire libre y sin prisas favorece a una mejor digestión, por lo que la comida nos va a sentar mejor.
Una sobremesa armoniosa, en el que el aire puro es aspirado tranquilamente, sin agitación, provoca una disminución de los pensamientos sobre enfermedades y preocupaciones que pesan a la persona.
Comer rápido y terminar saciado en cada comida hace que una persona tenga más probabilidad de sobrepeso y obesidad. Así que ya sabes relájate, reserva una de nuestras mesas y disfruta de la comida.
La hora de comer es tiempo para comunicar, expresar emociones y discutir ideas. Aunque todos tenemos unos horarios muy ajustados, reunirse para compartir este tiempo es disfrutarlo más.
Comer juntos es una tradición muy importante para la familias en nuestra cultura. Mantener esta tradición influye en la nutrición, y también es una manera de expresar afecto y fortalecer relaciones.

Los mejores lugares para comer al aire libre

Barcelona

Nuestros rincones favoritos son; el Parque del Turó, el Parque de la Mar Bella o el Parque de la Ciutadella. Y por supuesto, cualquiera de sus playas urbanas, son un espacio relajante para disfrutar de un rato de desconexión.

Zaragoza

La ribera del Ebro en cualquiera de sus puntos, está ganando cada vez más adeptos. Podrás llegar en solo 10 minutos desde Zenit Don Yo.

Practicar algo de deporte al aire libre y disfrutar de una completa ensalada es el plan preferido de los más healthy. Sin olvidarnos del Parque Grande, o de los Jardines de La Aljafería.

Pamplona

Sin duda alguna, el Parque de la Media Luna con su estilo romántico y las vistas al rio Arga es nuestro preferido para disfrutar del sol de mediodía en la capital navarra.

Acompañar la comida con unas copas y un buen vino de la zona, o de la cercana D.O.Ca Rioja te convertirá en todo un experto. Y si ya tienes tu cesta de picnic, serás objeto de envidia.

Bilbao

Situado en el Barrio de Abando, a menos de 15 minutos caminando de Zenit Bilbao, encontramos el Parque de Doña Casilda, comer junto al lago, si el tiempo lo permite es una auténtica delicia.

Sevilla

El Alamillo en la Isla de la Cartuja, es uno de los parques preferidos por los sevillanos para hacer un picnic o para practicar algún deporte.

Sus dimensiones hacen realmente fácil encontrar un rincón para disfrutar de la tranquilidad y alejarse del bullicio del centro de la ciudad.

Málaga

Situados en la ladera sur del Monte de Gibralfaro, se encuentran los Jardines de Puerta Oscura, uno de nuestros preferidos de la ciudad, sobre todo si vas con niños.

Disfrutar de sus fuentes, sus terrazas a distintos niveles, admirar todas las especies de árboles y comer en familia es el plan perfecto para el próximo domingo.

A Coruña

Por unanimidad, el mejor lugar para hacer un picnic en la capital gallega es el Parque de la Torre de Hércules, es un museo al aire libre.

Disfrutar de las mejores vistas del Atlántico, pasear entre menhires y contemplar la gran rosa de los vientos hacen de este lugar un rincón mágico.

30 minutos y un espectacular paseo separan el parque de Zenit Coruña, así que, es una opción extraordinaria llegar caminando.

Madrid

Nuestro corazón está dividido entre los jardines del Templo de Debod y la Quinta de los Molinos.

Del primero nos encanta pasar el día completo, y disfrutar así, de una de las mejores puestas de sol de la capital. Y del segundo que es el gran desconocido para muchos, sin duda tienes que visitarlo durante los meses de febrero y marzo, para contemplar la explosión de los almendros en flor.