Y la jota se hizo danza. Miguel Ángel Berna estrenó ayer en el Teatro Principal con un éxito fulminante su último espectáculo Berna se escribe con Jota, una obra sobria y elegante que repasa la vida de Berna sobre las tablas, sus inicios en la jota y sus sentimientos sobre el baile aragonés.
El bailarín estará acompañado por el grupo Nobleza Baturra, ocho músicos, cuatro cantadores y la artista invitada María José Hernández. Todo un verdadero despliegue de profesionales para ahondar en las raíces de esta expresión del folclore aragonés.
La música, bajo la dirección de Roberto Artigas y Joaquín Pardinilla, ofrecerá una amplia variedad para acompañar las distintas etapas, un recorrido desde los orígenes hasta el sentir actual, pasando incluso por un homenaje al desaparecido José Antonio Labordeta.
El espectáculo ofrece durante más de una hora la auténtica pasión que siente el artista por la jota, y supone uno de los retos más importantes para el zaragozano. «Nunca he abandonado mis raíces pero en este proyecto las muestro muchísimo más», explicó. El bailarín reconoció que este trabajo ha sido fruto de toda su experiencia vivida y que le ha costado mucho esfuerzos y preparación. «He tardado 42 años en llegar a crearlo. Todo lo que he bailado, cantado y vivido ha servido para crear la obra», comentaba Berna, durante uno de los descansos del último ensayo.
El bailarín estará hasta el domingo 19 en, un viaje en el tiempo, bailando del pasado al futuro con sus raices muy presentes.